Hoy se conmemoran 125 años desde que el Congreso Nacional del Ecuador oficializó el escudo de armas que identifica al país.
El 31 de octubre de 1900 se estableció el Día del Escudo Nacional, bajo la presidencia del general Eloy Alfaro Delgado.
El diseño del escudo ecuatoriano es obra de Pedro Pablo Traversari, quien se inspiró en el escudo de 1845. A su vez, ese fue diseñado por el poeta y prócer José Joaquín de Olmedo.
El Escudo Nacional de Ecuador a través de la historia
Antes de su consolidación, este emblema experimentó varias modificaciones: en 1845, la Convención Nacional reunida en Cuenca aprobó un cambio de escudo tras la victoria del Gobierno revolucionario.
En 1860, durante la presidencia de Gabriel García Moreno, se mantuvo la bandera de la Gran Colombia, mientras que el escudo continuó siendo el de 1845, adaptado al tricolor gran colombiano.

Finalmente, en 1900, bajo la gestión de Eloy Alfaro, el Congreso Nacional definió los símbolos. Se mantuvo el diseño original de Olmedo, ajustando los colores de las banderas y la orientación de la cabeza del cóndor, consolidando así el escudo que hoy conocemos bajo la creatividad de Traversari.
Características del símbolo patrio
El escudo ecuatoriano tiene forma ovalada y cada elemento refleja un aspecto clave de la historia y geografía del país.
En su parte superior se ubica el Sol, acompañado de los signos zodiacales de Aries, Tauro, Géminis y Cáncer, que representan los meses de marzo a junio, relevantes durante las luchas entre los revolucionarios de Guayaquil y el gobierno del general Juan José Flores.
En la parte inferior destaca el Chimborazo, emblemática montaña andina, bajo un cielo azul. De sus glaciares nace el río Guayas, que fluye hacia la región costera, simbolizando la unidad nacional entre Sierra y Costa.
Un barco a vapor navega por el río, evocando la construcción del primer buque de vapor en la costa del Pacífico en 1841 cuyo mástil tiene la forma de un caduceo, símbolo de navegación y comercio.
El escudo, al igual que la bandera, surgió como un símbolo de identidad común tras las guerras de independencia. Sus elementos reflejan la mezcla de raíces europeas e indígenas. A la vez que evidencian los valores y la visión de las élites políticas que han influido en la historia del país.
El Escudo de Ecuador, un reflejo de identidad y diversidad
Además de su valor histórico y simbólico, el Escudo Nacional del Ecuador se observa como un reflejo de la identidad y la diversidad del país, indican historiadores.
Cada elemento recuerda hechos y personajes relevantes de la historia. Además, transmite un mensaje sobre la riqueza natural y cultural del país.
A través de un emblema de tal importancia, se busca asimismo fomentar el orgullo cívico y recordar a los ciudadanos que los símbolos patrios no son adornos, sino recordatorios de la historia, la unidad y los valores que han definido a Ecuador desde su nacimiento.
Hoy, en entidades educativas y gubernamentales, los ciudadanos le rinden tributo al Escudo Nacional. Además, se destaca su importancia ante otras celebraciones extranjeras. (13).