El Observatorio de Conflictos de la Universidad Central del Ecuador reportó 427 asesinatos múltiples entre noviembre de 2023 y septiembre de 2025, un lapso en el que cada episodio registró más de tres fallecidos. La cifra evidencia un incremento sostenido de hechos violentos que han golpeado a diversas provincias del país, entre ellas Guayas, Manabí, Los Ríos y El Oro, donde se concentró la mayor cantidad de casos.
Diez masacres sacuden al distrito Manta–Montecristi–Jaramijó
En el distrito policial Manta, Montecristi y Jaramijó, se registraron 10 asesinatos múltiples en 2025, acumulando 51 víctimas mortales de las 488 muertes violentas contabilizadas en la jurisdicción hasta diciembre. Las autoridades han catalogado estos episodios como los más graves del año por su nivel de letalidad y por la reiteración de patrones asociados al crimen organizado.
El primer hecho ocurrió el 9 de enero en el barrio Santana, donde asesinaron a cinco personas en el interior de una vivienda. Un mes después, el 14 de febrero, en el barrio Amazonas 2, se produjo la masacre más sangrienta del año en Manabí: ocho personas, incluida una niña, fueron atacadas a tiros en horas de la noche. Tres días más tarde, el 17 de febrero, otro ataque múltiple estremeció a la comunidad de Sí Vivienda, dejando cuatro víctimas. Estos primeros casos ya advertían una escalada violenta sin precedentes en el distrito.
Ataques consecutivos y víctimas menores de edad
La violencia continuó el 20 de abril, cuando cinco personas —entre ellas otra niña— los asesinaron en el interior de una vivienda del conjunto habitacional Rania, en Manta. Los informes policiales señalaron que los individuos utilizaron armas de grueso calibre. En Pile, Montecristi, se registró el quinto caso: cinco personas fueron asesinadas y posteriormente calcinadas cerca al vehículo en el que se movilizaban. Este ataque mostró un nivel de saña que generó alarma pública y movilización policial ampliada.
El 16 de julio, uno de los hechos más mediáticos del año ocurrió en la vía a San Mateo. Allí asesinaron a Leonardo Briones, el presunto líder de Los Lobos, junto con su esposa y dos guardaespaldas. Horas después, un ataque armado en un night club de Jaramijó dejó cinco muertos, hecho que según la Policía estaría relacionado con el atentado ocurrido más temprano.
Cierre de año marcado por nuevos ataques
Un día después, el 17 de julio, la violencia se trasladó nuevamente a Montecristi, en la parroquia Leonidas Proaño. Allí asesinaron a seis personas en los exteriores de un taller de motos. Con este ataque, el distrito sumó tres masacres en menos de 48 horas.
El penúltimo caso se registró el 10 de septiembre en un hostal de Costa Azul. Allí cinco personas, entre ellas dos futbolistas de ExaPromo Costa, los asesinaron en un hecho que estremeció al entorno deportivo local. El último ataque múltiple ocurrió el 9 de noviembre en el sector San Pedro, allí acribillaron a cuatro personas. Con este hecho, el distrito cerró el año con un acumulado sin precedentes en asesinatos múltiples. (17)