Un hombre autoproclamado profeta, identificado como Ebo Noah, ha construido ocho grandes arcas de madera en un campo polvoriento de Ghana. El objetivo es salvar a un grupo selecto de personas de un supuesto “gran diluvio” que, según sus afirmaciones, acabará con el mundo el 25 de diciembre de 2025. Esta iniciativa, inspirada en visiones divinas, se ha convertido en un fenómeno viral en redes sociales.
Decenas de sus seguidores participan en cánticos, oraciones y reuniones, mientras que otras personas lo califican como un posible farsante. El proyecto de Noah surgió a partir de una serie de sueños. Según relató a medios británicos, Dios le reveló escenarios apocalípticos: lluvias continuas durante tres o cuatro años, ciudades inundadas y continentes desapareciendo bajo el agua.
Ebo Noah corta la madera y construye sus arcas
El profeta africano se presenta como una versión moderna del Noé bíblico, encargado de advertir a la humanidad sobre una catástrofe inevitable. Asegura que no se puede evitar el desastre y que la única opción es prepararse para sobrevivir. Actualmente, el avance de las arcas alcanza el 80%, según sus declaraciones. Los videos iniciales, que mostraban a Noah cortando madera en un terreno árido, ganaron tracción en plataformas digitales tras su anuncio sobre el fin del mundo en 2025.
Estas grabaciones han acumulado millones de vistas, generando un debate polarizado. Por un lado, seguidores lo veneran como un auténtico mensajero divino, participando activamente en eventos espirituales que incluyen oraciones colectivas y cánticos. Por otro lado, escépticos lo tachan de farsante, cuestionando la veracidad de sus visiones y el propósito real de las construcciones.
Ghana, un país con fuerte tradición cristiana
La figura bíblica de Noé, descrita en el Génesis del Antiguo Testamento, relata una inundación universal ordenada por Dios. Según la Biblia, el diluvio fue para purificar la Tierra, salvando solo a Noé, su familia y parejas de animales en un arca. Casos modernos de profetas autoproclamados, como los vistos en África y otras regiones, a menudo se viralizan en redes sociales, amplificando mensajes de advertencia sobre desastres globales.
En Ghana, un país con fuerte tradición cristiana y espiritual, tales fenómenos atraen a comunidades locales que buscan guía en tiempos de incertidumbre climática y social. Medios británicos han citado directamente a Ebo Noah, quien enfatiza que las arcas están destinadas a un “grupo selecto” de sobrevivientes, aunque no ha especificado criterios de selección. Las estructuras, descritas como enormes embarcaciones de madera, se erigen en un área rural, atrayendo curiosos y devotos.
Hasta el momento, no se reportan intervenciones oficiales de autoridades ghanesas, aunque el impacto viral podría generar mayor escrutinio.Este caso resalta cómo las redes sociales potencian narrativas proféticas, con palabras clave como “diluvio 2025”, “arcas en Ghana” y “profeta Ebo Noah” impulsando su difusión. Mientras el mundo observa, el proyecto continúa avanzando.