La Planta de Tratamiento de Aguas Residuales (PTAR) Las Esclusas celebró su primer año de operación contractual en agosto de 2025. Durante este año ha depurado más de 67 millones de metros cúbicos de aguas servidas, un volumen comparable a llenar 27.000 piscinas olímpicas.
Esta obra registra una inversión de $205 millones del Banco Mundial y el Banco Europeo de Inversiones. Además ha transformado la calidad de vida de 1.1 millones de habitantes del centro y sur de la ciudad, al tiempo que protege el río Guayas y mejora la salud pública.
Un cambio radical para Guayaquil
Antes de la operación de PTAR Las Esclusas, las aguas residuales de sectores como el Guasmo, Suburbio e Isla Trinitaria se vertían sin tratamiento al Estero Salado y el río Guayas, generando malos olores, proliferación de mosquitos y riesgos sanitarios.
Carlos Delgado, residente de Pradera 3 por 30 años, recuerda: “No se podía ni comer por el olor fétido de las tuberías que desfogaban al río. Ahora, todo eso se acabó”.
La planta, ubicada estratégicamente, procesa las aguas servidas de estas zonas y las devuelve limpias al río Guayas, beneficiando no solo a los sectores ribereños, sino a toda la ciudad.
Infraestructura y operación de vanguardia
El proyecto de la planta de tratamiento incluyó la construcción de estaciones de bombeo, la línea de impulsión Pradera-Las Esclusas, redes de alcantarillado sanitario en el suburbio oeste y un emisario subfluvial para la descarga final. Desde agosto de 2024, tras una fase de asistencia técnica, la planta es operada por la concesionaria Interagua, bajo la supervisión de la Empresa Municipal de Agua Potable y Alcantarillado de Guayaquil (EMAPAG). Este modelo garantiza una gestión eficiente y sostenible, consolidando a Guayaquil como líder en el tratamiento de aguas residuales en Ecuador.
Un paso hacia la sostenibilidad total
La PTAR Las Esclusas es un componente clave en el objetivo de tratar el 100% de las aguas residuales urbanas de Guayaquil. Esta obra se fortalecerá con la futura operación de las plantas Los Merinos, Mi Lote y Chongón. Este avance alivia la presión sobre el sistema hidrológico de la ciudad, que históricamente ha enfrentado desafíos por el vertido directo de aguas servidas. Además, la mejora en la calidad del agua del río Guayas tiene un impacto positivo en los ecosistemas locales y en sectores como el turismo y la pesca.
Vecinos agradecen por planta de tratamiento
Para los residentes, los beneficios son tangibles. “Antes, estar en la esquina era insoportable por los olores. Ahora, el ambiente es otro”, afirma Delgado. Esta transformación no solo mejora la calidad de vida, sino que también fomenta la convivencia en comunidades que antes sufrían las consecuencias de la contaminación. La planta trata un volumen equivalente al consumo de agua de más de 300.000 hogares al año. Con ello demuestra su capacidad para atender las necesidades de una ciudad en crecimiento.
Hacia un futuro más limpio gracias a esta planta depuradora
Con un enfoque en la sostenibilidad, la PTAR Las Esclusas representa un modelo replicable para otras ciudades ecuatorianas. La colaboración entre el Municipio, Interagua y organismos internacionales ha permitido financiar y ejecutar una obra que combina tecnología avanzada con impacto social. A medida que Guayaquil avanza hacia la meta de tratar todas sus aguas residuales, proyectos como este reafirman el compromiso de la ciudad con un futuro más limpio y saludable.