La mañana de este miércoles, 19 de noviembre de 2025, el ministro del Interior de Ecuador, John Reimberg, negó que la salud del exvicepresidente Jorge Glas esté en peligro en la Cárcel del Encuentro, en Santa Elena, tras denuncias de su abogada sobre falta de atención médica y condiciones inhumanas.
El ministro detalló que el exvicepresidente ha tenido al menos cuatro visitas médicas desde su llegada, rechazando cualquier incumplimiento de estándares humanitarios. “No sé si pensaron que iban a un centro recreacional, o a lo que estaban acostumbrados en las cárceles anteriores”, puntualizó.
Sin embargo, la abogada del exvicepresidente, la manabita Sonia García Vera, insiste en que éste es tratado con “crueldad” y “negligencia médica deliberada” en el nuevo centro carcelario.
Jorge Glas sufre “negligencia médica deliberada”
A través de su cuenta de X, la tarde de hoy, García Vera indicó que “el ministro puede repetir en televisión que ‘ha tenido más de cuatro visitas médicas’, pero la realidad que describo, y que consta en registros y comunicaciones formales, no es una ‘opinión’, es un cuadro clínico de riesgo vital“.
De acuerdo a su versión, “las famosas ‘visitas médicas’ son exactamente eso, visitas. Ambulatorias. Sin historia clínica, sin evaluación física completa, sin laboratorio, sin especialistas, sin medicación adecuada y sin un solo parámetro que permita hablar de atención médica efectiva. Tomar signos vitales no es tratamiento, y repartir lo que ‘queda’ de medicamentos no es un plan terapéutico”.
Añadió que las autoridades de Gobierno “no autorizan el ingreso de su internista. No autorizan a su neuropsiquiatra. No reponen la medicación esencial”, destacando que “eso no es un error administrativo, es trato cruel, inhumano y degradante, es negligencia médica deliberada“.
Vive sin agua, luz del sol o medicinas, asegura su abogada
Las declaraciones del ministros Reimberg, donde recalcó que la Cárcel del Encuentro donde está Glas no es “un centro vacacional, es un centro de máxima seguridad”, se dieron como respuesta a otro post de la letrada.
En este, publicado el martes 18 de noviembre, García Vera indicó: “Hoy me reuní telemáticamente con Jorge Glas. Lo encontré extremadamente debilitado, angustiado y con una resignación que golpea. Lo que está viviendo no es una detención, es un escenario de deterioro acelerado, incompatible con la vida y con cualquier estándar mínimo de humanidad”.
“No tiene agua para beber. Lo repitió varias veces, casi en un susurro ‘No tengo agua’. Por las noches no hay agua ni para el inodoro. La deshidratación ya es evidente. Está encerrado 24 horas al día (…) La celda no tiene luz natural. Hay una luz blanca encendida todo el día y toda la noche, que le impide dormir y lo mantiene desorientado”, agregó.
También denunció pésimas condiciones para su descanso y vestimenta. “El colchón está envuelto en plástico. Duerme sobre un material caliente y antihigiénico. No tiene sábanas, almohada ni toalla. Lleva ocho días con la misma ropa. No puede cambiarla ni lavarla. Vive en su propia ropa sucia. Está pasando hambre”, precisó la abogada.
“Estaba mejor en La Roca”, le habría dicho Glas a su defensora legal.
Versión internacional y antecedentes
El traslado de Glas a esta prisión de máxima seguridad ocurrió el 11 de noviembre, como parte de medidas gubernamentales para reubicar a reos de alta peligrosidad, en medio de alertas de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte IDH) por su estado de salud.
La Corte IDH ordenó el 4 de noviembre medidas provisionales para proteger la salud y vida de Glas, recluido desde 2017 por condenas acumuladas de hasta 22 años por delitos de corrupción, incluyendo el caso Odebrecht.
Jorge Glas, de 56 años, fue vicepresidente de Ecuador desde el 24 de mayo de 2013 al 6 de enero de 2018, en los Gobiernos de Rafael Correa y Lenín Moreno. (13).
