Autoridades aeronáuticas investigan un nuevo incidente de casi colisión aérea ocurrido cerca de Venezuela. Esta vez involucró a un jet privado y a una aeronave cisterna de la Fuerza Aérea de Estados Unidos. El evento lo reportaron los pilotos de un jet civil a través de comunicaciones de radio. Las comunicaciones quedaron registradas por la plataforma LiveATC.net. El hecho se produjo a unos 26 mil pies de altitud mientras el jet ascendía en espacio aéreo bajo control de Curazao.
De acuerdo con los audios revisados por CNN, los pilotos de un jet privado, Falcon 900 EX, cubría la ruta Aruba–Miami, cuando alertaron a los controladores aéreos de Curazao. Ellos evitaron, por poco, una colisión con otra aeronave de gran tamaño. En la transmisión, uno de los pilotos indicó que el avión con el que se cruzaron era “realmente grande”, y estimó que podría tratarse de un Boeing 777 o 767.
Dos hechos de casi colisión aérea en el Caribe
“Estaban realmente cerca”, señaló uno de los pilotos durante la comunicación con la torre de control. “Estábamos ascendiendo directamente hacia él”, agregó, al describir el encuentro ocurrido a aproximadamente 26 mil pies, equivalentes a unos 7.900 metros de altura. No se reportaron daños ni personas heridas como consecuencia del incidente.
Este hecho se registró apenas un día después de un evento similar ocurrido el viernes. Ese día, pilotos del vuelo 1112 de JetBlue, que operaba la ruta Curazao–Nueva York, informaron que detuvieron abruptamente su ascenso. Lo hicieron para evitar impactar a una aeronave cisterna militar estadounidense frente a su trayectoria. Según el reporte de la tripulación, la aeronave militar presuntamente volaba con el transpondedor apagado.
Se recopila información sobre ambos eventos
El Pentágono y las autoridades de aviación de los Países Bajos confirmaron que revisan el incidente reportado por JetBlue. Por su parte, el Comando Sur de Estados Unidos indicó que está al tanto de los reportes recientes relacionados con encuentros aéreos. La Junta Nacional de Seguridad en el Transporte de Estados Unidos (NTSB), por sus siglas en inglés) informó que está recopilando información sobre ambos eventos.
Curazao se encuentra ubicada a unos 64 kilómetros al norte de la costa de Venezuela, una región donde se ha registrado un incremento de la actividad militar en los últimos meses. En este contexto, la Administración Federal de Aviación (FAA) renovó esta semana una alerta dirigida a aeronaves civiles. En ella se recomienda “actuar con cautela” debido al deterioro de la situación de seguridad y al aumento de operaciones militares.