Aunque las erecciones nocturnas forman parte de la fisiología masculina y suelen indicar un buen estado de salud sexual, existe un trastorno poco conocido que puede convertirlas en una experiencia dolorosa y disruptiva: el síndrome de erecciones dolorosas del sueño (SRPE, por sus siglas en inglés). Según el especialista en medicina sexual masculina François Peinado, esta condición está infradiagnosticada y requiere atención médica para preservar tanto el descanso como la calidad de vida del paciente.
Erecciones nocturnas dolorosas, un problema que no debe normalizarse
El doctor François Peinado, urólogo y referente en salud sexual masculina, ha hecho un llamado a no restar importancia a las erecciones nocturnas que interrumpen el sueño y generan dolor. “No todas las erecciones nocturnas son saludables: algunas pueden ser dolorosas, persistentes y altamente disruptivas para la calidad de vida del paciente”, advirtió el especialista.
Peinado subraya que el SRPE sigue siendo un diagnóstico poco habitual fuera del ámbito urológico, lo que provoca que muchos hombres pasen meses o incluso años sin identificar la verdadera causa de su malestar. Con frecuencia, los afectados creen que se trata de estrés, problemas de próstata o molestias pasajeras, cuando en realidad existe un síndrome específico que cuenta con tratamientos eficaces.
Causas y diagnóstico del SRPE
El síndrome de erecciones dolorosas del sueño puede tener múltiples causas. Entre ellas, Peinado menciona el desequilibrio en la neurotransmisión dopaminérgica, alteraciones musculares del suelo pélvico e incluso la ingesta de ciertos medicamentos.
El diagnóstico del SRPE parte de una entrevista clínica detallada y, en casos necesarios, se complementa con estudios de sueño para evaluar el comportamiento nocturno del pene y descartar otras patologías.
Opciones de tratamiento disponibles
La buena noticia, según Peinado, es que este trastorno se puede tratar de forma personalizada. Las opciones incluyen relajantes musculares, bloqueadores hormonales de baja intensidad y fisioterapia especializada del suelo pélvico. “Cada caso se puede tratar de forma personalizada y conservadora antes de valorar opciones más complejas”, destacó.
El urólogo recalca que el objetivo no solo es eliminar el dolor de las erecciones. Sino también garantizar que el paciente recupere un descanso reparador y una vida sexual saludable.
Visibilizar para prevenir el sufrimiento silencioso
Uno de los principales retos del SRPE es que muchos hombres no hablan del problema por vergüenza o desconocimiento. Esto prolonga el sufrimiento y retrasa el inicio del tratamiento. Peinado concluye con un mensaje claro: “Una vida sexual sana empieza por un buen descanso. Y si las erecciones nocturnas son dolorosas, no hay que normalizarlas: hay que tratarlas”.