Desde la madrugada de este martes 26 de agosto de 2025 inició un operativo en la isla Jambelí, Santa Rosa, provincia de El Oro. Autoridades respondieron a la emergencia por una ballena muerta de aproximadamente 14 metros de longitud y 40 toneladas de peso.
El procedimiento contó con la coordinación de la Gobernación de El Oro dirigida por Jimmy Blacio, junto con el GAD Municipal, la Prefectura y la empresa privada. Además, se gestionó una gabarra para trasladar la maquinaria hasta el balneario insular cumpliendo todos los registros marítimos y terrestres.
Traslado y acciones inmediatas
El operativo arrancó alrededor de las 03:00 con la movilización de maquinaria desde Santa Rosa hacia el muelle de Quirola en Puerto Bolívar. Seguidamente, los equipos se embarcaron y avanzaron hasta la isla Jambelí, donde permanecen listos para ejecutar el procedimiento de manejo del cetáceo.
Las autoridades destacaron que el balneario de Jambelí tiene categoría de Urbano Satélite, lo que asigna la responsabilidad de la situación al GAD Municipal y al Ministerio del Ambiente. Con ello buscan garantizar un manejo ambiental adecuado frente a la magnitud del hallazgo.
Voces de la comunidad
Jilmer Solórzano Vilela, teniente político de Jambelí Rural, confirmó el despliegue de recursos y acompañó el procedimiento en la zona costera. También recordó la importancia de actuar con rapidez para mitigar los efectos de la descomposición del animal marino.
Por su parte, Federico Lazo, morador del sector, advirtió que “el olor ya era nauseabundo y pestilente, lo que puede causar enfermedades respiratorias. Pedimos una intervención inmediata por la salud de quienes vivimos en la zona”.
Ballena muerta: riesgo ambiental y hallazgos recientes
Fragmentos del cuerpo de la ballena se dispersaron en varios puntos de la playa, debido a la posible explosión interna provocada por gases de descomposición. Este fenómeno ocurre con frecuencia en animales marinos varados en tierra.
El mamífero marino llegó sin vida a la isla Jambelí el 21 de agosto de 2025, y desde entonces los pobladores han solicitado una pronta atención por el riesgo ambiental y sanitario que representa.