Las autoridades de Louisville, en Estados Unidos, confirmaron que ascendió a nueve el número de personas fallecidas tras el accidente aéreo registrado el martes 4 de noviembre. El vuelo 2976 de UPS Airlines, un McDonnell Douglas MD-11 se estrelló segundos después del despegue en el Aeropuerto Internacional de Louisville, en Estados Unidos. Además de los fallecidos, las autoridades reportan cerca de 20 heridos.
La aeronave, con destino a Honolulu, contenía aproximadamente 38 mil litros de combustible en el momento del impacto. Aquello provocó una explosión masiva y un incendio que se extendió por varios edificios cercanos. El incidente ocurrió cuando el avión había alcanzado solo 55 metros de altitud tras recorrer unos 55 metros en la pista 17R. Se presume que el avión perdió su motor derecho durante el despegue.
Accidente aéreo se dio durante el despegue
Según datos preliminares de la Administración Federal de Aviación (FAA) el MD-11 descendió abruptamente y colisionó con dos estructuras industriales adyacentes al aeropuerto. Aquello generó una bola de fuego visible a kilómetros de distancia. La Junta Nacional de Seguridad en el Transporte (NTSB) y la FAA iniciaron de inmediato una investigación para determinar las causas, que podrían incluir fallos mecánicos.
Las autoridades no han emitido conclusiones oficiales por lo que todo lo que se ha dado a conocer hasta ahora es información preliminar. UPS Airlines, una de las principales empresas de transporte de carga aérea en Estados Unidos confirmó que el vuelo llevaba solo tres tripulantes a bordo. Se trataba del capitán, primer oficial y un ingeniero de vuelo. La compañía no ha detallado el estado de estos empleados, pero autoridades locales indicaron que probablemente figuran entre las víctimas fatales.
Varias personas están desaparecidas tras el hecho
“Estamos profundamente entristecidos por este accidente en Louisville, hogar de nuestra aerolínea y miles de empleados de UPS“, declaró la empresa en un comunicado. Entre las víctimas terrestres se encuentran al menos cuatro personas que murieron en el suelo, según el alcalde de Louisville, Craig Greenberg. Más de diez familiares han reportado a personas desaparecidas en la zona de impacto.
Hasta el mediodía de este miércoles, once heridos habían sido trasladados a hospitales locales, incluyendo el University of Louisville Health. Allí, dos permanecen en condición crítica en la unidad de quemados y ocho más están estables pero hospitalizados. El gobernador de Kentucky, Andy Beshear, advirtió que el número de muertos podría aumentar conforme avancen las labores de rescate en los escombros.
El aeropuerto, clave para el hub global de UPS, suspendió todas las operaciones inmediatamente tras el choque. Se emitió una orden de confinamiento en un radio inicial de ocho kilómetros, reducida progresivamente a dos para la mañana del miércoles. Decenas de vuelos resultaron cancelados o desviados, afectando el tráfico aéreo regional.
Otros accidentes del mismo tipo de aviones
Autoridades policiales y de emergencias, como el Departamento de Policía Metropolitana de Louisville y el Distrito de Bomberos de Okolona, continúan recolectando restos. Ellos han solicitando a la población que no manipule partes del avión para evitar riesgos. Este suceso revive recuerdos de accidentes previos con MD-11, como el choque de FedEx en 2009 o el de UPS en 2010, ambos por fallos en el sistema de control de velocidad.
UPS, con una flota de más de 300 aeronaves y operaciones en 220 países, enfatiza su compromiso con la seguridad. No obstante, este accidente aéreo representa un golpe significativo para su reputación en aviación de carga. Políticos locales, incluyendo los senadores Mitch McConnell y Rand Paul, expresaron condolencias y pidieron una investigación exhaustiva. El avión llevaba combustible suficiente para volar nueve horas que duraba el viaje.