El Gobierno de Malasia y la empresa de exploración Ocean Infinity reanudaron oficialmente este martes la búsqueda de los restos del vuelo MH370 de Malaysia Airlines, desaparecido en marzo de 2014 con 239 personas a bordo. La operación se desarrolla en el océano Índico y busca esclarecer uno de los mayores enigmas de la aviación moderna.
La confirmación se produjo a través de un comunicado de Ocean Infinity, en el que la compañía señaló que, debido a la sensibilidad del caso, todas las comunicaciones oficiales se realizarán mediante el Gobierno malasio. La empresa destacó que cuenta con respaldo estatal para ejecutar esta nueva fase de rastreo.
Un acuerdo que reactiva las tareas en el mar
El Ministerio de Transporte de Malasia había anunciado a inicios de diciembre que la búsqueda se retomaría el 30 de diciembre, tras firmar un nuevo acuerdo con Ocean Infinity. El contrato establece un período inicial de 55 días para realizar las labores en zonas específicas del océano Índico.
Ocean Infinity ya estuvo a cargo de la última búsqueda privada entre 2017 y 2018, que concluyó sin resultados concluyentes. Esta nueva operación se plantea como un intento renovado, apoyado en análisis técnicos más recientes y avances tecnológicos.
Zonas delimitadas a partir de nuevos análisis
La actual búsqueda se concentra en una franja de aproximadamente 15.000 kilómetros cuadrados del lecho marino del océano Índico. Esta delimitación se definió a partir de los últimos estudios de datos disponibles, incluidos análisis satelitales y modelos de deriva oceánica.
Las autoridades no han precisado públicamente la ubicación exacta de las zonas seleccionadas, argumentando razones operativas. Sin embargo, indicaron que se trata de áreas consideradas prioritarias por los investigadores en función de la información acumulada durante más de una década.
Tecnología de última generación para el rastreo
Para esta fase se emplearán vehículos submarinos autónomos, drones de aguas profundas y sistemas avanzados de escaneo del fondo marino. Estas herramientas permiten operar a grandes profundidades y mejorar la capacidad de detección en terrenos complejos.
Ocean Infinity aseguró que la tecnología utilizada incorpora mejoras respecto a búsquedas anteriores, con el objetivo de aumentar la precisión y eficiencia de las tareas, incluso en condiciones adversas del entorno marítimo.
Antecedentes de búsquedas interrumpidas
La última operación de búsqueda comenzó en marzo de este año, pero se suspendió semanas después debido al mal tiempo en la zona asignada. Las condiciones meteorológicas dificultaron el uso continuo de los equipos submarinos.
Con el nuevo acuerdo, la empresa retomó las labores bajo un esquema de “no hallazgo, no pago”, en el que solo recibirá compensación si logra localizar los restos del avión desaparecido.
Un incentivo económico condicionado al hallazgo
Según lo pactado, Ocean Infinity podría recibir hasta 70 millones de dólares por parte del Gobierno de Malasia si encuentra los restos del MH370. Este incentivo busca sostener el esfuerzo logístico y tecnológico que implica una operación de esta magnitud.
Las autoridades malasias señalaron que el objetivo principal es obtener información concluyente que permita esclarecer el destino final de la aeronave y cerrar un proceso pendiente para los familiares de las víctimas.
Un vuelo desaparecido sin explicación definitiva
El vuelo MH370 desapareció el 8 de marzo de 2014 cuando cubría la ruta entre Pekín y Kuala Lumpur. A bordo viajaban 12 tripulantes malasios y 227 pasajeros, en su mayoría ciudadanos chinos y malasios, además de personas de otras nacionalidades.
El informe final de la investigación concluyó que los controles del avión fueron manipulados deliberadamente para desviarlo de su ruta original, aunque no identificó responsables ni determinó qué ocurrió en la cabina antes de la pérdida de contacto.
Un enigma que persiste tras más de diez años
Pese a los restos hallados en distintas costas del océano Índico, atribuidos al MH370, los investigadores no lograron reconstruir completamente los hechos ni determinar el lugar exacto del impacto.
Sin embargo, la nueva búsqueda mantiene abiertas las expectativas de obtener respuestas definitivas sobre la desaparición del avión, considerado uno de los casos más complejos y prolongados de la aviación internacional.