Un grave accidente de tránsito en el sur de Perú dejó al menos 37 personas muertas y más de una docena de heridas la madrugada de este miércoles 12 de noviembre. El siniestro ocurrió en el kilómetro 781 de la carretera Panamericana Sur, a la altura del distrito de Ocoña, en la provincia de Camaná, región Arequipa.
El autobús interprovincial, perteneciente a la empresa Llamosas, se dirigía desde la localidad de Chala hacia la ciudad de Arequipa. De pronto impactó contra una camioneta y cayó por un barranco de más de 200 metros, según confirmaron las autoridades locales.
El gerente regional de Salud de Arequipa, Walther Oporto, informó a la emisora RPP que 36 personas fallecieron en el lugar y una más murió en el centro de salud de Ocoña. “Es probable que ya sea la cifra definitiva”, declaró.
Respuesta de las autoridades de Perú
Entre los fallecidos se encuentran hombres, mujeres y niños. Las tareas de rescate se extendieron durante toda la madrugada, con la participación de bomberos, policías y personal del Ministerio Público. Todos enfrentaron dificultades por la profundidad del barranco y las condiciones del terreno.
De acuerdo con la Gerencia Regional de Salud, 14 personas resultaron heridas. A la mayoría la trasladaron al Hospital de Camaná, mientras que cuatro pacientes en estado crítico resultaron evacuados a la ciudad de Arequipa para recibir atención especializada.
El lugar del siniestro, en el sector conocido como puente Ocoña, es considerado uno de los tramos más peligrosos de la Panamericana Sur. Le atribuyen esta característica por sus curvas pronunciadas y la falta de señalización adecuada.
Acciones coordinadas
El gobierno regional de Arequipa informó que continúa coordinando acciones con la Policía Nacional y el Ministerio de Transportes para determinar las causas del accidente. Las investigaciones preliminares apuntan a un exceso de velocidad o una posible invasión de carril antes del impacto.
En Perú, los accidentes viales son una constante preocupación. Según datos del Ministerio de Transportes, cada año mueren más de 3.000 personas en siniestros de tránsito, muchos de ellos relacionados con falla humana, malas condiciones de las vías o deficiencias mecánicas.
Las autoridades locales han reiterado el llamado a las empresas de transporte para que refuercen los controles de seguridad y a los conductores para que extremen precauciones en las rutas interprovinciales, especialmente en los tramos de montaña del sur del país.
El país vuelve a estremecerse con una tragedia que revela la urgencia de mejorar la seguridad vial y el control del transporte público interprovincial.